HABRÁ MAR

Estas semanas de buen tiempo me encantan. Como a muchos cuando sale el sol, a mi se me cambia hasta la forma de ver las cosas. Me vuelvo más optimista, con más ganas de hacer cosas y sonrío un poco más. Y eso que yo he vivido la mayor parte de mi vida en Pamplona y allí el sol brilla por su ausencia… Estos días que hemos tenido un poco de tiempo para estar con calma, planeábamos como ya habréis hecho la mayoría, nuestras minivacaciones de verano. Días de calma mirando al mar. Muchas me decíais que vivimos en un lugar de ensueño y no nos hacía falta la playa, pero para mi ver el mar ha sido siempre una inyección de paz y alegría completamente necesario en mi vida. Un año sin verlo...imposible. Pienso en las siestas con Bob Dylan, los olores, los sonidos…

Esas sensaciones que desde niño tienes metido dentro de tí y de vez en cuando necesitas volver a recordar. Lejos de toda esa maraña de blogosfera que nos inundaba estos días con el festival de coachella, modelitos con indispensables espadrilles de Mint & rose o las controvertidas birkenstock, veranos adelantados con postureo incluido, instafoods, pies en el agua, etc. Yo soy más simple, lo reconozco. Me gusta vivir en mi mundo, como siempre he dicho. 

La blogosfera...en pequeñas dosis. Y mi verano, ajeno.

Mint & rose

Y en nuestra particular búsqueda del lugar perfecto (que ya hemos encontrado), inspiraciones como estas para pensar en nuestro último verano de dos, aunque seamos tres desde hace varios meses! 

No habrá siestas con Bob Dylan, ni olor a sur...pero habrá MAR. 

Via

Y para todos aquellos que esta semana se os esté haciendo un poco cuesta arriba, recordad: 

"No llores porque ya se terminó, sonríe porque sucedió" (Gabriel García Marquez)

BONNE JOURNÉE!